Te damos algunos consejos para empezar tu huerta, para seleccionar y elegir qué plantas tener en tu huerta.

Dependiendo del espacio disponible, hay algunos consejos para empezar:

Empezá tu huerta en un espacio con suficiente luz del sol, ya sea en macetas, almácigos o espacios abiertos.

Cuida que tus mascotas no puedan acceder al espacio de huerta, especialmente si vas a producir alimentos para consumir, porque las heces de animales pueden transmitir enfermedades.

-Dependiendo el espacio que tengamos disponible, y si no tenemos espacios amplios con tierra, es recomendable usar macetas o almácigos de al menos 40 centímetros de alto, para permitir el crecimiento de las raíces.

Una vez tenemos estos puntos cubiertos, tenemos que tener algunos cuidados para sembrar las plantas que vamos a tener en nuestras huertas.

Siembra y trasplante:

Siembra directa:

Los vegetales de semillas grandes, como el zapallo, zapallito, melón, sandía, porotos y maíz o no se adaptan al trasplante y tienen que ser sembradas directamente en el mismo lugar en el que va a crecer la planta. Otros vegetales, como la zanahoria, la espinaca, el rabanito o la remolacha, tampoco se adaptan al trasplante y tienen que ser sembradas de manera directa. 

Siembra por trasplante:

Los vegetales de semillas pequeñas, como las de lechuga, coliflor, morrones o berenjena deben ser plantandos en macetas o almácigos, antes de ser llevadas a su lugar definitivo.
Dependiendo el tipo de planta, se trasplanta cuando tiene 4 hojas (para verduras de hoja) o el tallo tiene el grosor de un lápiz (para verduras y frutas de tallo).

¿Cómo aprovechar mejor tus espacios y cuidar el sustrato?

Una buena manera de optimizar el cuidado de la huerta es a través del aprovechamiento y la rotación de los cultivos

Al sembrar, o trasplantar plantines, es recomendable cuidar la distribución de las plantas, alternando especies de crecimiento vertical (puerros, tomates, por ejemplo) con especies de crecimiento horizontal, que ocupan una mayor superficie de la huerta (lechugas, repollos). De esa manera, aprovechamos mejor el espacio y podemos sembrar más variedad de plantas.

Es importante también rotar los cultivos una vez cosechados, sembrando distintas variedades en el mismo espacio de huerta, para no agotar el sustrato.

Cómo cuidar y fortalecer tu huerta agroecológica:

Para tener una huerta agroecológica, se tiene que evitar el uso de pesticidas industriales. Pero igual que en otros espacios de huerta, las plagas pueden afectar nuestras cosechas. Por eso, te proponemos sembrar plantas que protejan contra las plagas y, además, atraigan insectos benéficos, como los polinizadores y depredadores de plagas.

Para atraer abejas y otros polinizadores, es recomendable contar con:

-El romero
-Las margaritas
-Las caléndulas
-Las lavandas.

Los árboles frutales como los manzanos o los cerezos también tienen algunas de las flores favoritas de los polinizadores. 

Por otro lado, estas plantas aromáticas y flores repelen muchos insectos dañinos y depredadores de las huertas y atraen insectos depredadores, como la Vaquita de San Antonio, que se alimenta de los pulgones y la mosca blanca, evitando que ataquen nuestras plantas.

¡Los insectos también son una parte fundamental de nuestra huerta agroecológica! ¿Te gustaría que hablemos más sobre barreras verdes, insectos aliados de la huerta y control agroecológico de las plagas? ¡Contanos!